Las enfermedades cardiovasculares (ECV) representan la principal causa de muerte a nivel mundial. Diversos estudios dan cuenta de que el riesgo relativo de desarrollo y/o muerte por tales enfermedades puede ser significativamente reducido en forma menor en individuos que muestran un alto consumo de alimentos ricos en polifenoles, particularmente, polifenoles del tipo flavonoides.
Si bien ciertas frutas y verduras destacan por su alta concentración en flavonoides, el cacao constituye también una muy buena fuente de dichos compuestos.
El cacao puede contener entre 10 y hasta 50 mg de polifenoles totales/g, dependiendo de su origen y de la forma de procesamiento de sus granos frescos (fermentación, secado, tostado, alcalinización y conchado).
Relativo a la mayor parte de las frutas, el cacao presenta una mayor concentración de flavonoides del subtipo flavanoles, principalmente, catequina y epicatequina.
El cacao contiene, además, dímeros de estos flavanoles llamados procianidinas (del tipo B1, B2 y B3).
Cacao: Acciones biológicas relevantes a sus beneficios cardiovasculares.
En la última década se han llevado a cabo numerosos estudios tanto clínicos como epidemiológicos que correlacionan inversamente el consumo de cacao con varios factores de riesgo y desarrollo de enfermedades Cardiovasculares. Previo a revisar dichas evidencias, a continuación se describen –en forma breve- algunas de las acciones biológicas promovidas por los flavanoles del cacao y que actualmente son consideradas relevantes a los beneficios cardiovasculares que conlleva el consumo de cacao.
Acciones antioxidantes: El estrés oxidativo, sea que éste se manifieste como un aumentado daño oxidativo a la lipoproteína de baja densidad (LDL) o como un aumentado daño oxidativo a componentes de células del endotelio vascular, es considerado una condición clave en el desarrollo y/o en la progresión de diversas enfermedades cardiovasculares. Las acciones antioxidantes de los flavanoles del cacao emergen de la habilidad que, al igual que otros flavonoides, tienen estos para remover o neutralizar radicales libres y para prevenir su formación. Adicionalmente, ciertos flavanoles actúan inhibiendo la actividad y/o reprimiendo la expresión de enzimas pro-oxidantes como xantina oxidasa y NADPH oxidasa. Algunos flavanoles actúan, además, induciendo la expresión de diversas enzimas antioxidantes.
De acuerdo a diversos estudios experimentales, y otros de intervención en humanos, el consumo de cacao se traduce en un menor estrés oxidativo, evidenciado en una menor “oxidabilidad” de LDL, en una disminución de ciertos productos de oxidación celular y marcadores de estrés oxidativo plasmáticos, y en un aumento de la capacidad antioxidante del plasma.
Acciones sobre la función plaquetaria y anti-inflamatoria: El consumo de cacao puede reducir el riesgo de formación de trombos a través de una modulación favorable de la función plaquetaria. Estudios tanto in vitro como ex vivo dan cuenta que tal acción emerge primariamente de la capacidad que tienen los flavanoles del cacao para inhibir la activación y agregación de las plaquetas; dichos efectos residirían, a lo menos parcialmente, en la capacidad que tienen los polifenoles del cacao (monómeros y dímeros) para disminuir la formación de ciertos leucotrienos (como LT4) y aumentar la de ciertas prostaciclinas (como PGI2), acciones vasoprotectoras y anti-inflamatorias, respectivamente.
La formación de ateromas en el sub-endotelio es un proceso crónico e implica la producción continua de numerosos factores pro-inflamatorios. Destaca entre dichos factores el complejo proteico NF-kB. La activación de NF-kB en leucocitos y en células endotelio-vasculares favorece la adhesión y la migración de los primeros (principalmente bajo la forma de monocitos) hacia el sub-endotelio vascular, así como la secreción de mediadores pro-inflamatorios y citotóxicos. Los flavanoles del cacao reducen la actividad de NF-kB vía “dow-regulation”, previniendo con ello la activación/migración de monocitos y atenuando la producción de mediadores pro-oxidantes e inflamatorios.
Acciones vasculares: Junto a su capacidad para prevenir la formación de trombos, ciertos flavanoles del cacao tienen también la capacidad para incrementar la producción y la disponibilidad de óxido nítrico. Como se sabe, un aumento en la disponibilidad de óxido nítrico se traduce en un efecto vasodilatador, y por ende, en una acción de protección cardiovascular (por la consiguiente reducción de la presión arterial).
El consumo de cacao no solo induce vasodilatación, sino además inhibe la migración/adhesión de monocitos hacia el subendotelio vascular, la proliferación de células de la musculatura lisa, y la agregación plaquetaria. Lo anterior constituye un espectro de acciones anti-aterogénicas y cardioprotectoras por parte de los flavanoles del cacao.
¿Cuales son los efectos que realmente produciría en humanos el consumo de cacao?
Según el estudio (Zutphen Elderly Study 2006) realizado con 470 hombres no afectados por enfermedades CV ni por diabetes, se observó que un mayor consumo de cacao está asociado a un significativamente menor riesgo y muerte por enfermedades cardiovasculares. Relativo al tertil (tercio) de menor consumo de cacao (0,36 g/día), el de mayor consumo (2,3 g de cacao/día) mostró 50% de menor mortalidad.
Estudios intervencionales en los cuales se ha administrado cacao a voluntarios sanos, dan cuenta de que el consumo de tales productos tiene un claro efecto vasodilatador arterial. Como se mencionara anteriormente, tal efecto es atribuible a la capacidad de los flavanoles del cacao para incrementar los niveles de NO•; como resultado de la activación/inducción de la enzima NOSe (mayor producción de NO•) e inhibición de la enzima NADPH-oxidasa (con lo cual se genera menos superóxido y por ende menos NO• es removido), y de una acción directa de remoción de anión superóxido por parte de los flavanoles.
Respecto a las propiedades de los flavanoles del cacao para modular favorablemente la función plaquetaria (reduciendo el riesgo de formación de mediadores de inflamación y de trombos), Ostertag et al (2010), en una revisión sistemática de 25 estudios de intervención en humanos, encontró que solamente el cacao y no otros alimentos ricos en polifenoles muestra, en forma consistente, un efecto inhibidor de la actividad y agregación plaquetaria.
Del mismo modo, en un meta-análisis de estudios de intervención realizado por Hooper et al. (2008), en los cuales la ingesta de alimentos que contienen flavonoides fue debidamente controlada, se estableció que entre todos los alimentos ricos en polifenoles consumidos, el cacao sería el único capaz de inducir un significativo efecto (agudo y crónico) de vasodilatación (medida como vasodilatación mediada por el flujo sanguíneo o Flow-Mediated Dilation; FMD).
Si deseas obtener los beneficios del consumo de cacao con nibs de cacao o té de cacao puedes comunicarte al 2314-3590 o a pedidos@bienestarnaturalgt.com.
Fuente: portalantioxidantes.com/cardioproteccion-y-polifenoles-del-cacao-“el-alimento-de-los-dioses”/